El historial de la Fuerza Aérea Argentina (FAA) comenzó con la fundación de la Escuela Militar de Aviación el 10 de agosto de 1912, siendo sus precursores varios oficiales del Ejército argentino, entre los que resalta la personalidad del ingeniero Jorge Wewbery, pionero de la aeronáutica argentina.
Desde su creación, la FAA en sus etapas de fructífera trayectora institucional desempeñó múltiples actividades promoviendo la industria aeronáutica, además de formar en sus institutos meritorios aviadores y aerotécnicos. Entre sus lauros destaca el premio Nobel de la paz, en 1988.
Estos datos históricos fueron rememorados por el agregado de Defensa y Aeronáutico a la Embajada Argentina, comodoro Miguel Mario Kozelnik, al celebrar los 104 años de la FAA, en acto celebrado en la residencia aeronáutica, donde se congregaron diplomáticos, miembros del alto mando militar boliviano y otras personalidades ligadas a la Agregaduría.
La ceremonia fue realzada por el obispo castrense, Mons Fernando Bascopé Müller, quien elevó una invocación religiosa.
En esta importante ocasión, también se rindió homenaje a los 55 hombres de la FAA caídos en combate y a los 6 tripulantes fallecidos en Bolivia, el 9 de marzo de 2006 cumpliendo misiones de apoyo humanitario.
El Agregado argentino entregó un presente a la FAB, en reconocimiento a los años de trabajo mancomunado y a la amistad fraterna.
A su vez, las agregadurías de diversos países entregaron presentes al anfitrión.
Un brindis de honor, música, cuadros de danza y el tradional churrasco argentino deleitaron a los invitados en un espléndido mediodía paceño.
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